Un pequeño gesto hacia la diferencia

Desde hace un par de años contamos con comedores en las escuelas para que los alumnos reciban, por lo menos, una comida de calidad al día. Le dimos prioridad a este proyecto, especialmente en Sare Bigi, donde las familias son muy pobres y los más pequeños no estaban recibiendo una dieta que se adapatara a sus necesidades.

Contratamos cocineras del pueblo y fueron ellas las que establecieron los ingredientes de las comidas que van se van a suministrar, pero ahora hemos decidido dar un paso más y vamos a hacer un pequeño cambio en beneficio de muchos, vamos a cambiar el aceite de palma (de cultivo no sostenible) que se está usando por aceite de girasol.

El coste en Gambia del acéite de girasol es un poco mayor que el del aceite de palma, pero con el cambio vamos a aportar nuestro grano de arena para parar las deforestaciones que están sufriendo bosques primarios, especialmente en Malasia, Indonesia, América del Sur, Papua Nueva Guinea y Camerún.

Además las poblaciones indígenas también están sufriendo las consecuencias, pueblos enteros son obligados a abandonar su hábitat en la selva y algunos líderes campesinos han sido “eliminados” por organizar protestas. Una vez ha sido expulsados y obligados a vivir fuera de su habitat se les suele dar trabajo en modo de semiesclavitud relizando trabajos que nadie quiere hacer a cambio de un techo, comida y alchol.

Una vez se expulsan a los poblados de la selva, se provocan incendios para eliminar la selva original y dejar un campo yermo listo para el nuevo cultivo. Se estima que en estos incendios más de 50.000 orangutanes han sido quemados vivos.

El impacto de la deforestación en los ecosistemas es dramático en el medioambiente. Además de la enorme pérdida de biodiversidad y de privarnos de nuestro pulmón planetario, la quema de árboles y arbustos para las plantaciones de palmeras provoca cantidades de humo tóxico alarmantes, acelerando el calentamiento global.

Pagando 0,36 centimos de euro más por litro, vamos a dejar de colaborar con la extinción de los orangutanes en indonesia, el genicidio de los pigmeos Baka en Camerún, la emisión de gases invernadero, la contaminación por pesticidas de rios y acuiferos....¿merece la pena no?